La Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) y su Fundación tuvieron a su cargo una gran inversión social de 19 millones de euros en Castilla – La Mancha. Esta suma de dinero está dirigida a la creación de empleo y formación para la inserción de aquellas personas que tienen la desgracia de tener alguna discapacidad que le imposibilite obtener un trabajo adecuado para poder demostrar sus cualidades.
El año anterior, la ONCE alcanzó ventas de más de 70 millones de euros en la región, lo cual marca un número muy elevado que permite pensar que dentro del ámbito del empleo se podrá ver avances muy notorios en el futuro más cercano.
La inversión en educación, empleo, rehabilitación, tecnología accesible, eliminación de barreras y solidaridad con “otras capacidades”, con el único objetivo concreto de lograr una mayor cantidad de puestos laborales para lograr la inserción de aquellos que no tienen trabajo porque recién inician su búsqueda o porque fueron despedidos hace poco tiempo.
Gracias a la suma de dinero depositada se hicieron 4.310 empleos para habitantes de la ciudad. Lo mejor aún es que la mayoría fueron ocupados por personas con alguna discapacidad.
También hay que destacar a la media nacional que vio un progreso histórico de 100.000 empleos que se desarrollan por personas con dificultades diferentes.
El delegado territorial de la ONCE, Antonio Cebollada, se mostró muy satisfecho con todo lo que se está realizando, al decir: “Hubo una gran cantidad de incorporaciones de personas con capacidades reducidas al mercado laboral, y todas ellas se efectuaron con una total normalidad”.
En 2009 se crearon 79 proyectos de accesibilidad a barrios, pueblos o ciudades de residencia de la región con un valor económico mucho menor ya que sólo ascendió a los 1,2 millones de euros. Esta cantidad es muy inferior si se tiene en cuenta los 70 millones que se invertirán en la actualidad.
